Flora:
Por la naturaleza de su clima, la vegetación es abundante y variadísima: existen extensas zonas cubiertas de selva que poseen maderas de óptima calidad como almendro, amarillo, cedro, caoba y nogal; palmeras como cachipay. La macana abunda mucho; la ceiba, los guamos, aguacates y mangos complementan el paisaje, sin olvidar las piñas y los naranjales.
Fauna:
Existió una gran variedad de animales monteses. En la Conquista los españoles vieron jabalíes, tigres, micos, gatos de monte, cerdos salvajes, osos hormigueros, osos negros, osos pardos y venados.
Estos animales hoy están extinguidos. Se encuentran comadrejas, faras, martos, serpientes venenosas de muchas clases; aves muy variadas, animales de caza existen muchos.
En síntesis, el paisaje geográfico que ocuparon los Muzos, con su clima tropical, su exuberante vegetación, variedad de animales monteses, sus abundantes aguas, encerrado por colonias, les permitió desarrollar su propia cultura, que los identificó como pueblo aguerrido y antropófago.
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